Las herramientas personalizadas son herramientas especiales que se fabrican según los requisitos de cada cliente. Se utilizan principalmente cuando una tarea de producción ya no puede realizarse con herramientas estándar. Este es el caso, por ejemplo, si la tarea de mecanizado es demasiado compleja para las herramientas estándar o si se requieren tiempos de ciclo más cortos. En la práctica, entonces deben utilizarse varias herramientas, lo que provoca tiempos de inactividad más largos, más desgaste y una mayor susceptibilidad a los errores.
Un molde especial es una alternativa en este caso. Se trata de herramientas fabricadas especialmente para requisitos individuales. Puede tratarse, por ejemplo, de una mezcla de diferentes herramientas, con las que se pueden realizar varias operaciones sin tiempos de inactividad. Pero también existen herramientas especiales para pasos de trabajo individuales cuyas geometrías están dotadas de extras especiales. También se pueden fabricar herramientas especiales de distintos materiales, como el metal duro, para satisfacer las necesidades del cliente.
Debido a su variedad prácticamente ilimitada de formas, las fresas especiales se utilizan sobre todo cuando se requieren procesos de fresado y taladrado complejos y altas velocidades de corte. Además de las herramientas de avellanado, un campo de aplicación habitual de
las herramientas de taladrado son, por ejemplo,
las brocas escalonadas. En este caso, una herramienta especial permite ahorrar mucho tiempo, ya que todos los pasos pueden realizarse en una sola operación y tienen una vida útil muy larga con materiales de alto rendimiento. Otro campo de aplicación son, por ejemplo, las herramientas de escariado y moldeado, con las que se pueden producir determinadas geometrías y formas en una sola operación.